Para muchas personas el llanto de un bebé puede ser totalmente normal, pero para los padres, esto puede generar mucha ansiedad y estrés al sentir que no son capaces de entender a su bebé para satisfacer sus necesidades. Para aprender cómo calmar a un bebé cuando llora, es necesario entender por qué lo hacen. A continuación, le enseñamos todo lo que debe tener en cuenta para comunicarse con su bebé, así como las mejores técnicas para calmarlo y cuándo es realmente preocupante el llanto.
¿Por qué lloran los bebés?
El llanto es el primer lenguaje verbal de un bebé. A través de esta acción, los bebés pueden expresar incomodidad o necesidad; por ejemplo: cuando tienen hambre o cuando algo les está molestando. Llorar también puede ser un método para liberar la tensión.
En general, un bebé puede llorar como respuesta a algún estímulo negativo que está experimentando. Sin embargo, saber la causa del llanto con certeza puede ser complicado. Conocer las razones por las cuales lo hacen puede ayudarle a conocer a su bebé y a entender qué debe hacer para hacerle sentir más cómodo o eliminar la molestia. A continuación le presentamos las más comunes.
Hambre
La Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) dice que un recién nacido puede comer cada 2 a 3 horas. Posteriormente, entre los 2 y 4 meses de edad, es posible que este tiempo sea espaciado de 3 a 4 horas. Por último, cuando cumplen los 6 meses, el período entre comidas será de entre 4 y 5 horas. A medida que aumenta este tiempo, también crecen las cantidades que consumirá por cada toma.
Lo que debe saber: Un bebé llora principalmente cuando tiene hambre. Sin embargo, esta es una señal tardía, así que antes de dejar que lo haga, lo ideal es prestar atención a señales previas al llanto que indican que quiere comer. Entre ellas, las más importantes son:
llevar sus manos a la boca
sacar la lengua
llevar cualquier cosa a su boca y succionar
abrir mucho la boca
mover constantemente la mandíbula y la cabeza en busca del pecho
lamerse los labios
Algunos bebés pueden llorar por estar demasiado llenos, ya que esto provoca incomodidad. Es probable que al principio le cueste identificar el llanto por comida, pero prestando un poco de atención, pronto lo podrá percibir con gran facilidad ¡Así que anímese!, usted mejor que nadie puede llegar a entender a su bebé.
Pañales mojados o manchados
¿Se imagina hacer sus necesidades fisiológicas en su ropa interior y no poder limpiarse usted mismo? Sería algo incómodo y desagradable, ¿cierto? Esto es, justamente, lo que le pasa a un bebé cuando tiene el pañal sucio. El llanto puede ser una manera de avisar que está incómodo porque tiene el pañal mojado y que necesita que se lo cambien.
Afortunadamente, saber si está llorando por esta razón es muy sencillo, ya que solamente debe revisar su pañal.
Miedo
Es normal que un bebé se asuste, se sienta solo o tenga ansiedad ante un desconocido, y esto puede provocar el llanto. Entre los 8 y 9 meses de edad los bebés son capaces de reconocer rostros, por lo que si se encuentra con una cara nueva, es posible que se asuste y comience a llorar. En estos casos, lo mejor es cargarlo y abrazarlo para que se sienta nuevamente seguro.
Sueño o cansancio
Un bebé recién nacido puede llegar a dormir 16 horas al día o incluso más, por lo que es totalmente normal que esté cansado gran parte del día y quiera dormir.
Normalmente, un bebé cansado se dormirá por sí mismo. Sin embargo, esto puede verse afectado por muchos factores externos. Por ejemplo, debe estar cómodo y en silencio para poder conciliar el sueño. Ahora, si por alguna razón no logra conciliar el sueño, esto creará irritabilidad e incomodidad, haciendo que comience a llorar para pedir ayuda de sus padres.
Frío o calor
Al tener mucho frío o mucho calor, su bebé se sentirá incómodo y le pedirá ayuda. Es importante considerar que si el ambiente está caluroso, no debemos abrigar mucho a nuestro bebé. De la misma forma, en ambientes fríos será necesario que cubra el cuerpo del bebé para mantenerlo cálido.
Enfermedad
Aunque el llanto es un método de comunicación bastante normal, este no suele durar más de tres horas si la causa se ha atendido. Por eso, si usted ha explorado todas las posibles opciones y aun así su bebé sigue llorando, es recomendable que consulte con su médico, ya que podría estar enfermo.
Para identificar con mayor precisión si su bebé está enfermo, no solo debe prestar atención al llanto prolongado, sino que también puede considerar otros síntomas como:
fiebre de 102 °F (38.9 °C) o superior en bebés de 3 a 6 meses
falta de apetito
manchas en la piel de color púrpura
dificultad para respirar
vómitos
diarrea
palidez o rubor en la piel
somnolencia
convulsiones
dificultad para tragar
apatía
inflamación del área blanda sobre su cabeza
Lo que debe saber: Cualquiera de estos síntomas producen llantos característicos que los padres reconocerán como anormales, permitiéndoles reconocer cuándo el llanto de su bebé es preocupante. Por último, recuerde que el llanto es un lenguaje y que si no está presente o rara vez su bebé llora, es importante que consulte a su pediatra para saber que todo esté bien.
9 mejores técnicas para calmar el llanto de un bebé

Existen técnicas que podemos implementar para calmar a un bebé. Con la intención de ayudarle en esta práctica, le indicaremos y explicaremos cada una de ellas:
1. Asegúrese de que no tenga algún problema físico
Como mencionamos con anterioridad, su bebé puede tener sueño, hambre, miedo, incomodidad por un pañal sucio o estar enfermo, por eso lo primero siempre será verificar que ninguna de estas causas sea la razón de su llanto.
2. Dele palmadas suaves en la espalda
Cargar a su bebé y colocarlo sobre su pecho para luego proporcionarle caricias suaves o palmaditas en la espalda puede ser reconfortante para él y calmar su llanto. También puede acariciar suavemente su cabecita.
3. Póngale música
A algunos bebés les encantan los sonidos agradables, por ejemplo, los de instrumentos de viento o de cuerdas pueden jugar a su favor. También puede encender algún electrodoméstico como una lavadora o aspiradora. ¡Eso puede ayudarle a que se calme! Otra opción son los juguetes infantiles que reproducen melodías ininterrumpidas.
4. Llévelo de paseo
La curiosidad de un bebé puede ser bastante activa. Por eso, si su bebé no deja de llorar, puede probar llevarlo de paseo. Este paseo puede ser dentro de casa, pero también puede intentar llevarlo fuera en la carriola, a pie o en el auto. Esta última opción puede ser especialmente efectiva gracias a las vibraciones que se producen al manejar.
5. Dele movimiento
En ocasiones solo debe mecer a su bebé para calmarlo. Esto lo puede lograr en una mecedora o acunándolo suavemente en sus brazos. Por otro lado, también podría tomarlo en brazos y caminar con él por la casa haciendo ruidos rítmicos, cantando o hablándole para que se distraiga.
6. Dele su chupete
Si su bebé ya está usando chupete, entonces puede intentar dárselo y ver si eso lo calma. Un bebé no solo busca succionar por hambre, también lo puede hacer como una necesidad de ejecutar el movimiento. Si aún no usa el chupete, pruebe ofreciéndole el seno.
7. Envuélvalo en una cobija
Si aún está muy pequeño para girarse solo, puede probar envolviéndolo en una cobija suave. De ser posible, déjele un brazo libre para que así pueda llevar su mano a la boca y chupar. Sin embargo, debe tener cuidado de no envolverlo demasiado porque podría provocarle mucho calor.
8. Báñelo con agua tibia
Muchos bebés aman la hora del baño. Ese momento de relajación y creación de lazos con los padres puede ayudar a que su bebé deje de llorar. Tenga en cuenta que el agua debe tener la temperatura adecuada, así como seguir los consejos de seguridad para los bebés en tinas.
9. Saque correctamente los gases
Después de alimentar a su bebé, es importante que utilice una buena técnica para sacar los gases que se acumulan al deglutir. Estos gases pueden incomodarlo mucho, al punto de provocar hipo o incluso dolor.
¿Por qué algunos bebés lloran más que otros?
Principalmente, esto se puede deber a que su bebé tiene algún dolor, enfermedad o incomodidad como los cólicos, que lo pueden estar molestando. Sin embargo, también existen bebés más sensibles que otros o que simplemente demandan más atención. Estos últimos son llamados bebés de alta demanda y deben ser atendidos a tiempo por sus padres.
Estos niños tienden a dormir poco durante el día y a comer con ansiedad, lo que resulta en demandar más estímulos de sus padres. Aunque pueda ser una situación desesperante y absorbente, esta condición hace que busque desarrollarse con mayor rapidez. Lo ideal es conocer a su bebé y aceptar su manera de ser. Le recomendamos acudir a su pediatra y que sea este quien determine si su bebé es de alta demanda o simplemente tiene alguna incomodidad física.
Relación entre los cólicos y el llanto
En cuanto a los cólicos del lactante, esta afección puede provocar dolores abdominales a su bebé. Y aunque sus causas no se han establecido con seguridad, existen algunas hipótesis como la entrada de aire al estómago. Es más probable en niños que toman biberón que en los que toman pecho, sobre todo si el chupón del biberón no es anticólicos. Ahora bien, otras causas pueden ser:
intolerancia a ciertas proteínas de la leche
alimentación exagerada
hambre
estreñimientos
sobreestimulación
hipersensibilidad a determinados estímulos
Lo que debe saber: Esta afección puede empezar durante las 3 semanas posteriores al nacimiento, pudiendo empeorar entre las 4 y 6 semanas, y normalmente mejora después de la 6.ª hasta la 12.ª semana. Un bebé que llora más de 3 horas al día, por más de 3 días a la semana y por al menos 3 semanas seguidas, es probable que tenga cólicos. Evite la entrada de aire utilizando chupones anticólicos para biberones o aplicando una correcta técnica de lactancia.
¿Qué hacer si mi bebé no para de llorar?
Es importante que tenga en cuenta su tranquilidad. Sabemos que la situación puede ser desesperante, pero mortificarse o alterarse solo puede empeorar la situación. Si no se siente capaz de tomarlo con calma, llame a otra persona que pueda ayudar a tratar la situación. Aunque no lo crea, esta podría ser la solución al llanto.
Si usted ha intentado todas las técnicas, se ha asegurado de que no tiene hambre, no quiere dormir, su pañal está limpio, en fin, ha agotado todas las posibilidades y, aun así, su bebé no deja de llorar, llévelo inmediatamente a un especialista.
Preguntas frecuentes
¿Cómo saber si un bebé llora de dolor?
Si su bebé llora muy agudo o de una manera que parece estar gritando con desesperación, es posible que tenga algún dolor. A menos que el dolor sea en una zona que al tocarla el bebé llore, saber con exactitud si algo le duele puede ser complicado. Sin embargo, prestando atención a la intensidad de su llanto, es posible deducir qué le pasa.
¿Hasta qué edad lloran los bebés?
Después de los 3 meses de vida, el llanto en un bebé tiende a disminuir. Luego de esto dependerá del desarrollo que tenga para aprender a expresar sus necesidades e incomodidades de otra manera. A medida que van ganando destrezas y madurez, los bebés comienzan a llorar con menos frecuencia.
¡Comuníquese con su bebé a través del llanto!
El llanto, más que un problema para los padres, es la forma en que se pueden comunicar con sus hijos pequeños para suplir sus necesidades. Gracias a la información que le hemos suministrado, ahora sabe que si su bebé llora es porque le está pidiendo algo, y de esta forma podrá calmarlo de manera efectiva. Aprender a entender a sus hijos es la mejor herramienta para mantener un buen desarrollo tanto físico como mental.
¡Y recuerde siempre que SABEResPODER!